
Me llamo Bic. Soy un bolígrafo de tinta azul. A lo largo de mi existencia me he cruzado con cientos de mi especie, somos todos iguales. Afortunadamente, aquel que me compró colocó una graciosa pegatina verde que marca mi diferencia con respecto a los otros. Vivo en un estuche rojo con cuadros, lo que me hace pensar que soy escocés, aunque la verdad es que de eso no entiendo nada. Como tampoco entiendo lo que mis dueños hacen, dicen o piensan.
El caso es que, desde el primer día “el amo” quedó encantado con mi trabajo. Existen bolígrafos que son unos auténticos vagos, les cuesta sacar la tinta, sin embargo, yo he promovido la fluidez de ideas. Pronto y gracias a esta virtud tuve el privilegio de tener el estuche especialmente para mí, pues antes me veía obligado a compartirlo con seres a mi juicio, bastante insoportables:
“Lápiz”- El cual sentía que había caído en el abismo del ridículo.
“Goma”- Una dama muy recta, cuando algo le disgustaba lo hacía desaparecer. No obstante yo jamás fui un blandengue como”Lápiz”, no consiguió borrar uno solo de mis escritos, creo que por ello no podía ni verme.
“Sacapuntas”- Un instrumento muy molesto (si se me permite decirlo), ya que como bien dice su nombre sacaba punta a cualquier cuestión, para mí su presencia era “non grata”, sin embargo, “Lápiz” se llevaba divinamente con él, a veces incluso mantenían extrañas relaciones.
Una vez desaparecidos (supongo que fueron trasladados al “estuche de las pinturas”, la razón la desconozco) mi vida fue mucho más cómoda: Realizaba mi trabajo cuando me obligaban a ello y el resto del día descansaba plácidamente… Bueno, he de reconocer que también he tenido mis problemillas.
Por ponerte un ejemplo, ¡para trabajar me quitaban el sombrero y me lo colocaban en el trasero! ¡Qué vergüenza! Francamente, no me gustaba. Actualmente no tengo sombrero pues acabó roto tras ser mordisqueado (no entiendo las costumbres humanas) así que he tenido que habituarme a la desnudez.
Otro asunto que me causa inquietud es el hecho de que a menudo (no se si porque las mesas están inclinadas, yo soy un patoso o mi dueño es tonto de remate) pruebo el suelo ¡Virgen santa, qué caídas! Y, ¿qué crees que hace mi dueño? Me recoge y observa si aún funciono. Luego me vuelve a dejar en la mesa ¿Querrá que me caiga de nuevo? ¿Es algún tipo de juego sádico? ¿Sabes lo que opino? ¡Qué es un egoísta! ¿Acaso no valgo nada para él sin mi tinta?
En fin, salvo ejemplos como los anteriores mi vida transcurría más o menos bien… ¡Hasta que me lo enviaste! ¿No sabes a que me refiero? Claro que sí, a la experiencia tan terrible que me sometiste:
“Dark-Pilot”. Un pilot de tinta negra cuyo corazón estaba envenenado. Era orgulloso, macabro, se jactaba de la rapidez de su trabajo y constantemente bramaba que mi generación sería historia, que él y sus compañeros monopolizarían el papel. A su lado me sentía viejo e ineficaz. Y por si fuese poco aguantarlo, encima mi dueño cada día lo usaba más a él y menos a mi…..Empecé a temer por mi destino…¿Y si corría la misma suerte que “Lápiz”, “Goma” y “Sacapuntas”? ¡Cómo lo odiaba… y cómo te odie a ti también! Porque tú, mi creador, osabas crear a un ser superior para divertirte con mi dolor y más tarde hacerme desaparecer, ¡la maldita ley del más fuerte!
Te odie tanto… Sin embargo creo que notaste un sufrimiento mayor al que esperabas y tu corazón paterno reaccionó cambiando los planes iniciales, por ello dotaste a ese ser despreciable con un defecto. El gran “Dark-Pilot” era más útil pero también más frágil. Un día padeció una caída de la que no salió. Y de esta forma descubrí que el pilot no era la especie que nos eliminaría asumiendo todo el poder, sino solo una raza más.
Y así, tras “Dark- pilot” y lo que el conllevaba (remordimiento) me enviaste una alegría, porque después de una vivencia mala siempre me envías una buena y viceversa.
Habían pasado unos meses, estaba aburrido, sin ninguna meta definida, en ocasiones incluso me costaba sacar la tinta (por cierto, cuando esto sucedía mi dueño me castigaba y humillaba restregándome… ¡Con la suela de un zapato!, ¿Qué te parece? Estos seres tienen unas ideas…) Y de pronto, como por arte de magia, percibí que varias de mis palabras habían sido subrayadas en rojo intenso. Sin querer me enamoré de la pasión que desprendía aquel tono. Pensé que nunca conocería a la dama que poseía dicho color tan seductor, ¡me equivoqué! ¡Ella fue mi nueva compañera! Ambos éramos almas solitarias, ambos necesitábamos cariño, ambos estábamos hartos de que nuestros esfuerzos en el trabajo no fuesen recompensados. Éramos iguales y distintos y por eso acabamos juntos, nuestra relación era y es perfecta, desde que nos unimos, ella magnifica mis ideas, las sustenta. También rectifica mis errores, es realmente maravilloso, siempre consigue alegrar cada una de las páginas que escribo. Con ella no me importa compartir lo único que poseo, el estuche. Es tan deliciosa... ¡Las palabras se quedan cortas para agradecerte el gesto que tuviste conmigo al enviármela!
Como puedes ver todo va bien, mejor dicho, iba bien hasta esta mañana. Verás, esta mañana, hacia las once, mi bella dama y yo escuchamos que a mi querido dueño le van a regalar algo que se llama ¿Erdonador? ¿Ordanedor? ¿Ordenador?.... ¿Qué es eso? ¿Debemos temerle? ¿Es otra dura prueba como la de “Dark-Pilot”?... No entiendo nada de lo que haces, pero debo respetarte pues tú me creaste, eres omnipresente y tus motivos tendrás para hacerme sufrir o reír a tu antojo…Solo espero que esta nueva época pase cuanto antes y que de nuevo me ofrezcas otro regalo como hiciste con mi maravillosa dama…
A veces me pregunto si lo que me ocurre a mí le sucede al resto de los seres que habitan este planeta…
Para mi creador, ”el Fabricante”
Como estas. Espero que bien. Como ya te dije leì este relato el otro dìa y me pediste que te lo comentara.
ResponderEliminar-Lo que màs me llamò la atenciòn del texo fue la sencillez expuesta en èl.No t complicas mucho la vida a la hora de las descripciones y eso esta bien, casi podria decir que es una cualidad.
Resulta un cuento muy divertido a la vez dejas entrever cierta moralina final.
De momento sòlo he leido este. Segùn vaya leyendo te ire haciendo mas comentarios (suena divertido jajaja...)